La Captación y la Fidelización del Talento en las Firmas de Auditoría
Uno de los principales retos a los que se enfrentan las firmas de auditoría es la captación y fidelización del talento. Esta preocupación es compartida por las grandes corporaciones profesionales del sector, como el Registro de Economistas Auditores (REA) y el Instituto de Censores Jurados de Cuentas de España (ICJCE).
Los análisis recientes revelan una creciente crisis de vocaciones en la auditoría. Cada vez hay menos profesionales que se incorporan a la profesión. Emilio Álvarez, presidente del REA, comentó en el diario Expansión el 3 de abril de 2023 que “existe un cambio de paradigma en lo que desean nuestros jóvenes, y una reducción de la población que dificulta el relevo de auditores de cuentas”.
El Cambio en la Percepción de la Profesión
En tiempos pasados, la auditoría era vista como una plataforma profesional, brindando una formación extensa y un acceso a múltiples realidades empresariales. Los profesionales eran rodeados por expertos que les ayudaban a formar un bagaje sólido, garantizando diversas opciones profesionales a futuro. Sin embargo, los jóvenes de hoy ya no se sienten atraídos por esta visión.
El Legado de Andersen
En los años 90, las Big Five (Arthur Andersen, Price Waterhouse, Coopers&Lybrand, Ernst&Young y Peat Marwick) representaban lo más alto de la profesión. Arthur Andersen se distinguió por su enfoque en auditoría y consultoría, convirtiéndose en un referente. En el libro El legado de Arthur Andersen, Carmelo Canales y Francisco López destacan principios clave como unidad, integridad, cooperación y talento, que marcaron el éxito de la firma.
El Principio del Talento: «The Best Place to Work»
Arthur Andersen promovía un ambiente donde solo los mejores profesionales podían ingresar, seleccionados con rigurosidad y formados a conciencia. Se les otorgaba responsabilidad desde el primer día y se les remuneraba generosamente. La cooperación era fundamental, pero la competencia también se fomentaba para lograr altos estándares de excelencia profesional.
Arthur Andersen, aunque cayó debido a sus propias ineficiencias, ha sido un modelo para muchas firmas más pequeñas. Intentamos replicar sus mejores prácticas, aprendiendo de sus errores.
La Profesión de Auditoría
Ser auditor no solo es una profesión, sino también un estilo de vida. La profesión ha evolucionado, y los perfiles profesionales necesarios son cada vez más multidisciplinarios. Esta transformación refleja la necesidad de adaptarnos al nuevo contexto y seguir siendo relevantes.
La auditoría es una profesión de interés público. Proporciona confianza a los inversores y genera valor a los clientes. Es fundamental que el regulador, el ICAC, y las corporaciones profesionales asuman un liderazgo para promover los beneficios de la profesión. Los líderes de las firmas de auditoría debemos salir de nuestra zona de confort y acercarnos a los estudiantes para fomentar su interés por la profesión.




